Parejas, patrimonios diversificados o decisiones sucesorias tomadas “a última hora”. En este contexto, una pregunta se repite: cuándo se puede impugnar un testamento y con qué argumentos reales (no emocionales) puede sostenerse una demanda.
Impugnar un testamento es un paso jurídico relevante: exige motivos sólidos, pruebas y una estrategia procesal clara. En este artículo te explicamos cuándo es posible solicitar la nulidad de un testamento en 2026, cuáles son las causas más habituales y cómo suele desarrollarse el procedimiento en Cataluña, de acuerdo con el Libro Cuarto del Código civil de Cataluña (sucesiones).
¿Qué significa impugnar un testamento?
Impugnar un testamento es solicitar judicialmente que el testamento sea declarado nulo (total o parcialmente) porque:
- No cumple los requisitos legales
- No refleja una voluntad libre y consciente
- Afecta a derechos sucesorios protegidos (como la legítima, cuando proceda)
En Cataluña, la normativa sucesoria establece formas y garantías para que la voluntad del causante quede correctamente recogida. Si quieres leer más contenido relacionado, tienes el blog del despacho.
¿Cuándo es posible impugnar un testamento en 2026? (Causas principales)
La impugnación no prospera por desacuerdos familiares ni por una “injusticia percibida”. Funciona cuando existen causas reconocidas y pueden probarse.
1) Incapacidad del testador en el momento de otorgar el testamento
Un testamento puede declararse nulo si, en el momento exacto de firmarlo, el testador no tenía capacidad natural para comprender lo que hacía ni querer sus consecuencias.
Esto puede suceder, por ejemplo, en casos de deterioro cognitivo, patologías neurodegenerativas o episodios transitorios que alteren la conciencia. En estos supuestos suelen ser determinantes los informes médicos y la prueba documental.
Texto consolidado del marco sucesorio catalán en el BOE: Ley 10/2008, del Libro IV del Código civil de Cataluña.
2) Influencia indebida, presiones o captación de voluntad
Se puede impugnar un testamento si se prueba que alguien condicionó la decisión del testador (presión, manipulación, aprovechamiento de una situación de dependencia, aislamiento, etc.). Suele darse cuando hay cambios repentinos a favor de una sola persona o cuando el testador era especialmente vulnerable.
3) Incumplimiento de requisitos formales (defectos del documento)
La forma importa. Un testamento puede ser impugnable si existen defectos que comprometen su validez (según el tipo de testamento), como incidencias de identificación, firmas o irregularidades que pongan en duda la autenticidad del documento.
4) Vulneración de la legítima o de derechos protegidos
En Cataluña, la legítima reconoce a determinados familiares el derecho a obtener un valor patrimonial dentro de la sucesión. Si el testamento pretende ignorar este derecho sin base legal, a menudo la vía es ejercer las acciones de reclamación correspondientes para recuperar lo que les corresponde.
Para prevenir conflictos de este tipo (especialmente en parejas y familias reconstituidas), también puede interesarte este artículo de nuestro blog: Matrimonio vs pareja de hecho
¿Cómo se tramita una impugnación de testamento?
1) Análisis previo y recopilación de pruebas
Antes de demandar, es necesario construir el caso con pruebas. A menudo es clave obtener: informes médicos, copias de testamentos previos, documentación notarial, testimonios e indicios de dependencia o presión.
2) Interposición de la demanda
La demanda debe interponerse con una base jurídica sólida y dentro de los plazos aplicables. Si quieres una visión procesal actualizada sobre los requisitos previos y la procedibilidad, tienes este artículo del blog: ¿Qué son los MASC? Requisitos de procedibilidad y tipología – Poch Abogados
3) Juicio y resolución
El juez valorará la capacidad, la libertad del testador y la corrección formal del documento. Si se declara la nulidad, se aplicará el régimen sucesorio previsto por la ley o por el testamento anterior, según corresponda.
Cómo evitar conflictos: el consejo profesional
Aunque impugnar un testamento es una vía real, la mejor estrategia suele ser evitar tener que llegar a ese punto. Por ello es importante revisar el testamento periódicamente, no realizar cambios precipitados, dejar rastro documental cuando exista un contexto médico delicado que pueda generar dudas sobre la capacidad del testador y, sobre todo, contar con un asesoramiento especializado que oriente cada decisión sucesoria con seguridad jurídica.
Lo más importante a tener en cuenta
Impugnar un testamento en 2026 es posible, pero solo cuando existen causas reconocidas y pruebas suficientes. En un escenario de herencias cada vez más complejas, conocer los límites de la impugnación y actuar con criterio (y a tiempo) marca la diferencia entre un conflicto interminable y una solución viable.
Si te encuentras en esta situación o necesitas orientación para valorar la viabilidad de tu caso, en Poch Abogados te ofrecemos un asesoramiento riguroso y personalizado para que puedas tomar decisiones seguras y proteger tus derechos sucesorios. Contacta con nosotros y estudiaremos tu caso con total discreción y transparencia.